MANIFESTO DA DIRECÇÃO: Este blogue “www.sortesdegaiola.blogspot.com”, tem como objectivo primordial só noticiar, criticar ou elogiar, as situações que mais se distingam em corridas, ou os factos verdadeiramente importantes que digam respeito ao mundo dos toiros e do toureio, dos cavalos e da equitação, com total e absoluta liberdade de imprensa dos nossos amigos cronistas colaboradores.

sábado, 14 de dezembro de 2013

A propósito da bronca de Sevilha...

Com a devida vénia publicamos parte do editorial do "mundotoro" focado na Bronca do boicote das 5 principais figuras á empresa de Sevilha...



Legalmente hay, actualmente, una legitimidad contractual impecable. Quitadas las máscaras, con cinco representantes del toreo también legitimados (que nadie olvide que un contrato da legitimidad a una empresa, pero que el torero tiene la legitimidad de sus públicos y aficionados) hay dos legitimaciones en conflicto en el marco de lo que ya es un Patrimonio Cultural de los Españoles. Que Sevilla decida la legitimación más positiva. Por este orden: para el toreo, para Sevilla, para la Maestranza. No confundamos Pagés/Maestrantes con el toreo, ni con Sevilla, ni con Maestranza.


Tampoco sólo los toreros el toreo, de acuerdo. Pero sin ellos no hay toreo. Por tanto, que ahora no se abra debate sobre una confabulación anti empresas. Los toreros van a contratarse, no de cinco en cinco, sino de uno en uno, cada cual en las condiciones que acuerden, si les interesa a las empresas o no. No es un G5. Y al respecto dos cosas: una, las relaciones de amistad entre los cinco no son de colegas ni las de hace un par de años. Esto no es un compadreo. Dos: la crítica que en este medio se hizo sobre All Sports y el G10, nos legitima ahora para decir que esto no parte de plan alguno, sino de hartazgo. Que nadie se escandalice más allá de la definición de escándalo. El diccionario de la RAE dice que puede ser desde un tumulto hasta una admiración.

Nos habíamos acostumbrado a lo más escandalosamente silencioso e hipócrita. Vivir con la mordaza y la máscara. Es más, como escribió Simón de Beauvoir, lo peor de éste escándalo de carnaval de caretas, era que ya nos habíamos acostumbrado a ese escándalo. Ahora hay otro. Que corra el aire.