San Pedro Regalado, casi todo una mentira interesada...
Que los hechos son tozudos y acaban siempre poniendo en su sitio a todos aquellos que por su interés momentáneo conviene presentarlos de otra manera, dando explicaciones y razones a su conveniencia, es algo a lo que la propia esencia del ser humano nos acostumbra más de lo que desearíamos.
A las declaraciones del alcalde de Valladolid, que se definió aficionado taurino desde niño en la convocatoria pública de aquel acto de la Federación taurina, seguido con inusitado interés por el público y los medios de comunicación, cuando los tres alcaldes de la democracia, Bolaños, de la Riva y Puente, tuvieron mesa y micrófono para exponer su apoyo o rechazo a la fiesta de los toros y las protagonizadas últimamente en los diferentes medios, sigue ahora una nota hecha pública por la empresa de la Plaza de toros de Valladolid, tras el anuncio de la retirada del apoyo económico que entregaba el Consistorio a la Feria taurina de San Pedro Regalado.
Corren unos tiempos en que bajo la perspectiva de un cambio en costumbres, modos y maneras, de reeducación del pueblo y de adopción de modas contrarias a las tenidas desde antiguo, se tiene como moderno, distinguido, educado y humanitario la actividad contraria a la Fiesta. Así hoy se ha extendido con virulencia y amplitud el concepto antitaurino, la rotura con la fiesta de toros y sus luces y sombras de ayer, de hoy y de siempre, considerando atrasados, involucionistas, cavernícolas prehistóricos e incluso asesinos a quienes les gustan, acuden y participan en los toros.
Los políticos que viven de la política y muy bien por cierto, a costa de todos los ciudadanos que mantenemos el circo de la vida, cambian y solapan sus mensajes, adoptando otros, según como sople el viento de apoyos y permanencias en sillones, cargos, canonjías y famas en la cresta de la ola pública, sin importarles nada más que la inmediatez y su resultado inmediato para sus mismos, propios y exclusivos intereses.
La fiesta de los toros es el mejor y más limpio acicate del encuentro dominador de un hombre con la fuerza fiera, brusca y desatada de la naturaleza y se considera bien de interés cultural. Pues como tal merece la protección, igual que otros bienes y culturas, seguramente no aceptadas unánimemente por todos, como es lógico, como pueden ser las músicas de todo tipo, las artes de cualquier manifestación por espuria y aberrante que sea, los deportes profesionales, las contraprestaciones cinematográficas, las ayudas a empresas inútiles… Ahora solo los toros están en el punto de mira como objetivo y ellos son la única preocupación de quienes actúan como inquisidores y vapuleadores de su final.
La gerencia de la Plaza de toros de Valladolid ha contestado al alcalde de la capital, Óscar Puente y a sus explicaciones sobre la retirada de la subvención municipal con una nota que desgranada dice así:
“1. La inversión municipal de 150.000 euros no se dedica en exclusiva a la organización de una corrida de toros en San Pedro Regalado, sino que en su mayor parte va destinada a la promoción de una novillada para dar cabida a nuevos valores de la tauromaquia, en la que siempre se acartela al menos a un novillero de la ciudad de Valladolid.
2. Es falso que los festejos de la Feria de Ntra. Sra. de San Lorenzo se hayan reducido de ocho a cuatro: en 2015 se celebraron cuatro corridas de toros, una corrida de rejones, un espectáculo de recortes, un tentadero público y un espectáculo ecuestre, todos ellos sin ningún tipo de ayuda pública.
3. Es falso que los festejos taurinos en Valladolid no sean demandados por el público: en la feria de 2015 pasaron por el coso del Paseo de Zorrilla más de 40.000 personas en los cuatro festejos mayores, un 25% más por espectáculo que los 8.000 espectadores diarios que registra la Seminci (Semana Internacional de Cine de Valladolid), ciclo que el año pasado contó con una subvención municipal de 2.334.847 euros, quince veces más que los espectáculos taurinos.
4. Gestión Universal de Espectáculos Taurinos, S. L. no ha recibido notificación alguna por parte del consistorio para la “reunión” que el alcalde asegura haber concertado para mañana miércoles 2 de marzo de 2016.
Asimismo, la empresa gestora de la plaza de toros de Valladolid se pone a disposición de los medios de comunicación y del propio ayuntamiento pucelano para aclarar cuantos asuntos resulten de controversia respecto al aprovechamiento de la inversión municipal en los festejos de San Pedro Regalado.”
De manera que la Feria de San Pedro Regalado y la aportación municipal que se hacía lo era porque se promocionaba también la existencia y el riego de valores nuevos para la Tauromaquia, inicios que requieren sino mayor apoyo, al menos el mismo que otras manifestaciones culturales, pues los poderes públicos deben garantizar la equidad y justicia de todos los ciudadanos, no solo de quienes protestan en algaradas y violencias. O ¿no es cierto que los taurinos también aportan su dinero en forma de impuestos a la comunidad y al bienestar de esos políticos que luego se venden o se doblegan por un plato de lentejas o un cargo cualquiera, cuando sus intereses partidistas lo demandan?. Quiera Dios que no se olviden nunca que son servidores públicos, DE TODOS, con lo que conlleva la palabra servicio en su propia esencia.